El material recogido en los trabajos no es contaminante, sino caudal sólido de origen natural
La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha iniciado esta mañana la retirada de sedimentos del cauce del río Segura a su paso por el casco urbano de Orihuela, al inicio del encauzamiento, unos trabajos que está previsto finalicen el próximo miércoles y evitar de esta forma los malos olores que se producen con la llegada de las altas temperaturas. Así, el organismo de cuenca cumple el anuncio al que se comprometió el presidente de la CHS, Miguel Ángel Ródenas, durante la visita que realizó a la localidad el pasado 31 de mayo.
El comisario de Aguas de la Confederación, José Carlos González, ha visitado esta tarde Orihuela para observar la evolución de las tareas de retirada de los sedimentos. Es importante destacar que el análisis de las muestras tomadas indica que no se trata de lodos peligrosos, sino de sedimentos de origen natural.
El fenómeno de depósito de sedimentos se produce en pleno centro en Orihuela debido por el remanso generado por los azudes del centro de la ciudad, lo que genera la acumulación del caudal sólido en esta zona, que puede llegar a causar malos olores, sobre todo a altas temperaturas.
Para iniciar los trabajos, el organismo de cuenca ha tenido que reducir el caudal circulante por el casco urbano de la ciudad. Una vez conseguida esta bajada del nivel del agua, las máquinas han logrado entrar al cauce, que se encuentra canalizado, y han podido comenzar la retirada de sedimentos, que son trasladados por camiones de carga.
El comisario de Aguas de la Confederación, José Carlos González, ha visitado esta tarde Orihuela para observar la evolución de las tareas de retirada de los sedimentos. Es importante destacar que el análisis de las muestras tomadas indica que no se trata de lodos peligrosos, sino de sedimentos de origen natural.
El fenómeno de depósito de sedimentos se produce en pleno centro en Orihuela debido por el remanso generado por los azudes del centro de la ciudad, lo que genera la acumulación del caudal sólido en esta zona, que puede llegar a causar malos olores, sobre todo a altas temperaturas.
Para iniciar los trabajos, el organismo de cuenca ha tenido que reducir el caudal circulante por el casco urbano de la ciudad. Una vez conseguida esta bajada del nivel del agua, las máquinas han logrado entrar al cauce, que se encuentra canalizado, y han podido comenzar la retirada de sedimentos, que son trasladados por camiones de carga.
